¿QUÉ VAS A HACER
POR TU CUMPLEAÑOS? CORRER LA MARATÓN
POPULÁ
Llevo
ya dos años celebrando mi cumpleaños corriendo la Marasevi, que de toda la vida
organizaba el IMD. De repente me entero este año que el Ayuntamiento ha
decidido privatizar la maratón, mi maratón, y que ahora se llama Zurich
Sevilla. Pero…. ¿esto qué es? ¿dónde está el fomento del deporte y acercarlo a
la trinchera, al corredor populá?.... Claro que ahora esto de las carreras se
está convirtiendo en un negocio que da dinero… y hay que aprovechar. Y la
verdad es que lo han hecho estupendamente. Desde el merchandising hasta la
publicidad…. todo ha funcionado como un perfecto engranaje y ha sido todo un
éxito comercial. Y yo que me alegro.
En
la batalla con el IMD por intentar recuperar algo de la antigua Marasevi que se
había perdido en el proceso de privatización hacia la Zurich Sevilla se han ido
perdiendo guerreros aguerridos, que se rasgaban las vestiduras ante el cariz
que tomaba el asunto y que luego todo ha quedado en lo que ha quedado: unos
cuantos guerreros utópicos que se han marcado una maratón populá que ya
quisiera muchos.
El
sábado me di el paseíto de rigor por la Feria del Corredor en Fibes donde había
quedado con mi míster, ese Juan Carlos Arjona que tiene tela de paciencia
porque me manda los entrenos, luego yo los adapto a mi realidad con mis motivos
motivantes y al final saca lo mejor de mí y me va a convertir en alguien
regular en los entrenos y no caótica en entrenos y en participaciones…. fíjate
que tengo hasta planificada la temporada (aunque tú sabes que meteré alguna que
otra cosita imprevista ejem ejem) y me regaló esa “peaso” de camiseta que
pasearemos por donde haga falta.

No
creo engañar a nadie si digo que el comité organizador ha funcionado
perfectamente y que el día H a la hora acordada estaba todo preparado para
disfrutar como enanos de un recorrido que podía convertirse en carrera populá,
media maratón o maratón completa, a gusto del consumidor. Teníamos
avituallamiento, bici escoba, reportera “pofesional”, juez, equipo de apoyo y
globos para todos los ritmos…. Genial.
Todo
empieza con la instalación del avituallamiento-carpa-vestuario-guardarropa y la
preparación de mesa del juez con trofeos, medallas y todo lo necesario para
empezar a rodar. Risas aseguradas. Monte empieza a cantarme el cumpleaños feliz
y el de seguridad del parque ya alucinaba con vernos a todos a esas horas y con
unas ganas de diversión algo raritas para los tiempos que corren.




Después
de besos, felicitaciones, fotos oficiales y promesas de batir marcas personales
empezamos a rodar.
Rodar en Sevilla es una pasada y si vas por el río todavía más. Qué poco partido le sacamos al río!!!!! Pues ir por el Alamillo hasta el huevo de Colón, que mira que es feillo el pobre, por lo menos para mí, y luego por la otra orilla viendo Triana a lo lejos…. La salida del sol….. el fresquito mañanero… la bulla de la Zurich por ahí cerca…. y risas muchas risas…. Y casi sin darme cuenta estamos ya en el Cachorro, cruzando para ir a por la barra de labios, digo por la Torre Pelli. Triana despertándose. Y ya estamos en la Cartuja…. obras…. luego hablaré de los simpáticos albañiles…. y el pabellón de la Navegación (otro gran desconocido en la metrópoli)…. Y al río de nuevo…. jardines desiertos…. la bulla de la Zurich a lo lejos…. y de repente el Teatro Central…. los kilómetros caen muy rápido ya que voy disfrutando de la mañana y el trote a mi ritmo, sin prisas ni pausas…..
Esta vuelta la hago totalmente en solitario: hay que educar a la cabecita que no es malo dar vueltas en el mismo circuito (menos mal que no me aburro que al primer síntoma de aburrimiento mi coco manda parar y eso no hay manera de evitarlo) y de nuevo en San Jerónimo…. y el río con sus pescadores… y los remeros entrenando (por cierto hay unos guiris muy rubios remando y sus entrenadores tienen un poderío de voz…. entre otras cosas ejem ejem) y de vuelta al Cachorro. Triana ya está despierta y con los ojos bien abiertos. Y de nuevo a la Cartuja y paso por las obras de la Torre Pelli…. entonces el simpático albañil de turno me grita “venga esos quilitos de más a quitárselos!!!!”….. y ahí me hierve la sangre y me paro en seco. Me vuelvo sobre mis pasos y le increpo…. “¿usted cuántos años tiene? yo tengo 51 y corro maratones y usted? cuando llegue a mi edad espero que se encuentre igual de bien que me encuentro yo. Ah! por cierto… mis kilos están estupendamente donde están, a mí me gustan y a mi marido más” Y volví a correr oyendo los aplausos de sus compañeros porque le dejé con la boca cerrada y los ojos abiertos de par en par… ¡Qué a gusto me quedé!

No
pude quedarme todo lo que quería porque tenía una familia, con gripe al 50%,
esperándome y no era plan de tenerlos abandonaítos todo el día, los motivos
motivantes que diría uno que yo me sé y al que quiero una jartá….
Pero
puedo asegurar que ha sido uno de mis cumpleaños más especiales que haya podido
celebrar: por el gusto de encontrarme con gente muy buena a la que ya conocía y
que cada vez quiero más (obí obá), porque conocí a otra pecha´de “güena” gente
de las que quedan pocas y por las que merece la pena meterse en las aventuras
que inicien y porque ése es el ambiente que a mí me gusta y en el que soy muy
feliz.
Así que gracias a todos (y no pongo nombres porque alguno se me olvidará
pero no quiero dejar a ninguno atrás), pero entenderéis que destaque a María
del Monte y a Miguel Ángel porque desde que los conozco no me pasan más que
cosas buenas y voy a acabar considerándoles mi talismán de la buena suerte.


